El nivel de vocabulario influye en la alfabetización informacional de los adolescentes, según la experta Emily Selvidge.
El dominio del vocabulario va a ser esencial en la era digital para poder comprender y analizar toda la información disponible de manera eficaz y eficiente. Sin embargo, la evidencia reciente muestra que los adolescentes tienen dificultades para encontrar y seleccionar la información más relevante que necesitan. En definitiva, tienen un nivel de vocabulario bajo.
En un informe de Oxford University Press se mostró que un tercio de los profesores percibía que el vocabulario se sus alumnos disminuía entre el comienzo y el final de la educación secundaria. Muchos de ellos achacan esta disminución a que los niños leen menos.
Los resultados de las estadísticas del National Literacy Trust de los últimos años, en cambio, no apuntan solo a esta causa. No obstante, si el vocabulario es limitado, enseñar habilidades de alfabetización informacional se vuelve difícil porque los estudiantes no tienen las herramientas más básicas para buscar y evaluar la información.
Según Selvidge, quizás el propio entorno digital sea en parte el culpable de este déficit de vocabulario. El uso de la tecnología, y de los dispositivos móviles en particular, puede estar limitando el desarrollo de la oratoria. También en el propio entorno familiar. ¿Cómo pueden padres y madres transmitir habilidades de oratoria a sus hijos?
Por otra parte, hay límites en el vocabulario y los niveles atribuidos en la lectura por placer de los niños. Algunas metodologías de lectura definen y miden la competencia a través de la ficción en lugar de adoptar un enfoque transversal. Los estudiantes tienen pocas oportunidades de jugar con las palabras, escuchar a los demás y copiar el vocabulario que utilizan.
Las limitaciones del vocabulario también están presentes en el lenguaje académico que se imparte a los adolescentes. El lenguaje académico a menudo se escribe en lugar de hablarse y, por lo tanto, puede requerir de una enseñanza explícita para su comprensión.
Del mismo modo, las personas con baja autoestima tienen niveles más bajos de vocabulario. Y la alfabetización informacional se basa en que las personas puedan poner a prueba su comprensión. Hay, por tanto, que desarrollar estas habilidades en los adolescentes para que puedan sobrevivir en el mundo digital.
Los bibliotecarios escolares podrían ayudar si se les emplea en un papel transversal y pueden desarrollar el uso de juegos de vocabulario. También hacer exposiciones y fomentar debates para corregir este déficit y permitir así una mejor comprensión para la alfabetización informacional.
Fuente: Information Literacy Group.
Imagen de Thomas Park para Unsplash