ROAR es una herramienta que ayuda a detectar a los lectores y lectoras con dificultades.
Identificar a los jóvenes lectores y lectoras con dificultades es una tarea larga y costosa para las escuelas. La razón es que requiere de pruebas individuales y de profesionales (docentes o especialistas) capaces de analizar los resultados. ROAR (Rapid Online Assessment of Reading) es una herramienta en línea que realiza esta tarea de forma rápida y fiable.
El Brain Development & Education Lab de la Universidad de Stanford es responsable de su desarrollo. Además, permite a los todos los centros escolares de su distrito evaluar a sus estudiantes para identificar problemas de lectura. Y lo hace en el mismo tiempo que se tarda actualmente en realizar una evaluación estándar a un solo alumno. Además de proporcionar a los docentes información útil sobre los problemas de cada estudiante, los datos generados en la evaluación contribuyen a avanzar en la investigación del laboratorio sobre los factores relacionados con las diferencias de aprendizaje de los jóvenes lectores y lectoras.
El Rapid Online Assessment of Reading ha sido diseñado a modo de juego de ordenador.
ROAR funciona en cualquier navegador de Internet. Se lanzó con una evaluación que mide la capacidad del estudiante para reconocer palabras rápidamente. Esta es una habilidad fundamental para la fluidez y la comprensión de la lectura. Su diseño lo asemeja a un juego de ordenador. Así, incluye personajes animados que guían a los estudiantes a través de la actividad. La prueba consiste en determinar si las palabras que aparecen en pantalla son reales o inventadas.
Por otra parte, sus desarrolladores han colaborado estrechamente con los directores de los centros escolares para elaborar informes de resultados interactivos para los docentes. Estos ofrecen estadísticas y visualizaciones desde el nivel de distrito hasta las aulas y los alumnos individuales. Además, mientras trabajan con colegios y especialistas para perfeccionar la herramienta, el equipo de trabajo desarrolla otras fórmulas para habilidades lectoras más complejas. Estas incluyen la conciencia fonológica y la capacidad de leer en silencio y comprender frases completas con rapidez y precisión.
Además de todas las ventajas que supone la intervención temprana cuando se trata de lectores y lectoras con dificultades, de cara a futuro, los investigadores esperan que los datos generados por el ROAR ayuden en última instancia a desarrollar enfoques personalizados para trabajar con lectores y lectoras con dificultades.
Podéis acceder a la herramienta a través de este enlace.
Fuente: Stanford University.