Según el informe Smart Toys: Hardware, Technology & Leading Vendors 2017-2022, las ventas de smart toys se triplicarán en los próximos cinco años.
Los smart toys empiezan a poblar los catálogos como una alternativa a los juguetes tradicionales. Se trata de propuestas muy sugerentes para los padres y mediadores. En primer lugar, por el atractivo que supone el elemento tecnológico. Pero también por su versatilidad: entretienen, enseñan, y un largo etcétera.
Según el informe Smart Toys: Hardware, Technology & Leading Vendors 2017-2022, elaborado por Juniper Research, las ventas de smart toys se triplicarán en los próximos cinco años. Un crecimiento que vendrá impulsado principalmente por la creciente popularidad de los juguetes conectados a smartphones . Y también por el atractivo de los ‘toys-to-life’ conectados a la consola.
Según este informe, Estados Unidos liderará la venta de smart toys, si bien China podría modificar esta tendencia. Pero la realidad es que estas propuestas acabarán llegando a todas nuestras casas.
Las cifras recogidas en este informe son muy alentadoras para el mercado pero también se ciernen algunas sombras. La principal es todo lo relativo a las cuestiones de privacidad. Las obligaciones en cuanto a las regulaciones de seguridad de los juguetes y de privacidad y protección de datos aumentarán. Pero ¿hasta qué punto estamos preparados para que nuestro pequeños sean monitorizados de forma casi constante?
Si no nos lo hemos planteado todavía, empieza a ser el momento de hacerlo. Hace unos meses asistimos a una conferencia sobre robots domésticos. Uno de los asistentes preguntó al ponente si sus robots estaban conectados a la Red y recopilaban datos de sus usuarios. La respuesta fue negativa pero en la última diapositiva de su presentación se daba cuenta de el número de millas que habían recorrido sus robots… Ahí queda eso.
Podéis acceder al informe completo a través de este enlace.